Una fuente de energía limpia, ilimitada, eficiente y que se puede aplicar a pequeña o gran escala. Suena bien, ¿verdad? Pues esta definición se podría aplicar perfectamente a la energía solar, que ahora vive un momento dulce y que se perfila como la gran promesa de futuro a la hora de generar energía eléctrica. Una circunstancia que puedes aprovechar para reducir el gasto en electricidad de tu negocio.
Antes de contarte por qué este es su momento, vamos a explicarte cómo se obtiene la energía solar y cuáles son sus principales ventajas.
¿Qué es la energía solar?
La energía solar es aquella que se obtiene a partir de las radiaciones que nos llegan desde el sol. Es decir: a partir del aprovechamiento de la radiación electromagnética que nos envía el sol, obtenemos esta energía, que después transformamos en electricidad. Esto quiere decir que la energía solar es gratuita y que durará tanto tiempo como duren el sol y/o nuestro planeta.
Para aprovechar la energía solar y transformarla en energía eléctrica, se utilizan básicamente dos métodos: convertirla en energía solar fotovoltaica, que es a lo que se dedican los paneles solares que conoces, o bien en calor para después producir electricidad. Este último sería el caso de las centrales termoeléctricas solares, que aprovechan ese calor que emite el sol para generar energía eléctrica.
Las principales ventajas del aprovechamiento de la energía solar tienen que ver con el hecho de que se trata de una fuente renovable, es decir, que no se agota y no genera emisiones.
Otro beneficio destacable es que se puede aprovechar a pequeña y gran escala. Esto quiere decir que no es imprescindible realizar grandes instalaciones para disfrutar de sus beneficios: sirven para obtenerla tanto las grandes granjas solares como los paneles de los tejados de las viviendas unifamiliares.
¿Por qué no ha triunfado hasta ahora la energía solar?
Con estas cualidades, no es extraño que la potencia fotovoltaica instalada a nivel mundial haya superado en 2017 a la nuclear, si se comparan los datos que ofrecen la Agencia Internacional de la Energía y la Organización de la Energía Atómica.
Sin embargo, aunque España es un país que recibe una gran cantidad de radiación solar debido a su climatología, el ritmo de instalación de potencia fotovoltaica ha sido muy discreto hasta la fecha. Entre las razones se encuentran las consecuencias de la crisis económica, que paralizó en gran medida las inversiones en este ámbito: los recortes en incentivos para la generación de electricidad de origen solar fotovoltaico a principios de 2011 fueron el primer gran revés para una actividad que hasta entonces estaba en plena ebullición.
El desarrollo del Real Decreto 900/2015 del 9 de octubre, que regula el autoconsumo, basado fundamentalmente en el aprovechamiento de energía fotovoltaica, tampoco ayudó precisamente al desarrollo de esta actividad en España.
Esta legislación es la que recogía el conocido “impuesto al sol”, así como otras trabas relacionadas con la instalación de paneles solares, como la prohibición de compartir instalaciones de generación. En la práctica, esto supone que las comunidades de vecinos no puedan utilizar paneles solares para dotar de electricidad a sus viviendas u oficinas, sino que solo pueden hacerlo con las instalaciones comunes como escaleras o garajes.
Así, el aprovechamiento de la energía solar en España ha vivido años difíciles, aunque ahora parece que esas circunstancias van a cambiar. Nos encontramos algunas novedades con respecto al peaje de respaldo, pero el texto tendrá que esperar a ser refrendado el próximo mes de enero en el Parlamento Europeo.
¿Por qué ahora es el momento de la energía solar?
En los últimos meses se han dado varios cambios que pueden catapultar definitivamente a la energía solar en España. Uno de ellos ha sido el acuerdo alcanzado recientemente entre el Consejo de Ministros de la Unión Europea y el Parlamento Europeo, por el que se fija una cuota mínima de energías renovables del 32% para 2030.
De esta manera, los Estados deberán reforzar su apuesta por el aprovechamiento de energías como la solar fotovoltaica para cumplir con el compromiso adquirido, que además podría elevarse (nunca reducirse) en una revisión acordada para el año 2023.
El acuerdo de la Unión Europea, además, parece haber acabado con el conocido como “impuesto al sol”. Hasta 2026, los Estados no podrán gravar el autoconsumo eléctrico en modo alguno. A partir de ese año, solo podrían hacerlo si se dieran ciertas condiciones que amenazaran la sostenibilidad del sistema eléctrico. Además, la UE reconoce como un derecho el que los pequeños productores reciban compensaciones económicas por verter electricidad a la red general, una ventaja que hasta ahora no se disfrutaba en España.
El nuestro fue uno de los países que apoyaron el aumento de la cuota mínima de energía renovable para la Unión Europea. Esta es una clara señal de apoyo al uso de energías renovables como la solar, que en los próximos años podría vivir una edad dorada en el país, tanto para el abastecimiento colectivo como para el autoconsumo. Una opción que puedes incorporar a tu negocio mediante la instalación de paneles solares fotovoltaicos. Si quieres que te asesoremos sobre la conveniencia del autoconsumo para tu empresa, no dudes en contactar con nosotros: nuestros expertos están a tu disposición.