En la intersección de la innovación tecnológica y la sostenibilidad, surge un vínculo cada vez más fuerte: la movilidad eléctrica y el comercio electrónico. En un mundo que busca reducir su huella de carbono y adoptar prácticas más amigables con el medio ambiente, la transición hacia vehículos eléctricos se presenta como una solución clave.
El avance de la movilidad eléctrica en el comercio electrónico
A lo largo de los últimos años, el comercio electrónico no ha ido más que aumentando y volviéndose más popular, en especial desde el estallido de la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, también gracias a esto está creciendo exponencialmente el tráfico de furgonetas y demás vehículos destinados al transporte de paquetería por carretera. Como consecuencia, se emiten más gases contaminantes a la atmósfera, no solo procedentes de aquellos vehículos que funcionan con combustible, sino también debido a que el número de automóviles en circulación aumenta y con ello, los atascos.
No es de extrañar, entonces, que a lo largo de los últimos años la movilidad eléctrica haya ido ganando popularidad en este sector empresarial. Gracias a ella, se consigue reducir el impacto contaminante de este transporte, al mismo tiempo que se mejora la eficiencia de todo el proceso logístico y se reducen los gastos económicos.
De acuerdo con el informe The dawn of electrified trucking, realizado por la consultora PwC, en los próximos 15 años los camiones eléctricos serán una realidad mayoritaria en una gran cantidad de países; y para 2030, los vehículos cero emisiones (VCE), serán hasta un tercio del total de los existentes en Norteamérica, Europa y China.
Ventajas de los vehículos eléctricos en las entregas
El progresivo aumento del uso de camiones y furgonetas eléctricas destinadas a la logística no es casual. Este tipo de transporte de mercancías aporta multitud de beneficios a las empresas que apuestan por él:
- Disminución de la contaminación: ya que los vehículos eléctricos no emiten gases contaminantes, son 100% limpios y sostenibles.
- Mayor eficiencia: las baterías de estos coches están en continua mejora, por lo que cada vez son más los que son una sola carga pueden recorrer una considerable cantidad de kilómetros.
- Circulación por ciudades: ya que gracias a la Etiqueta 0 pueden circular por Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), así como estacionarse en Zonas SER sin coste alguno.
- Mantenimiento menor: debido a que los coches eléctricos son mucho menos propensos a presentar averías que los tradicionales.
- Subvenciones: cada vez existen más ayudas públicas destinadas al sufragio de la compra de vehículos eléctricos, como la MOVES.
- Ventajas fiscales: por ejemplo, la exención del impuesto de matriculación o del de Vehículos de Tracción Mecánica.
Los vehículos autónomos y su impacto en el reparto
También el empleo de vehículos autónomos en el sector logístico cuenta con no pocas ventajas para el transporte de paquetes y su entrega efectiva:
- Mayor nivel de seguridad: ya que los vehículos autónomos eliminan errores humanos y, por lo tanto, disminuyen la posibilidad de accidente.
- Reducción de gastos: gracias a que cuentan con la capacidad de tomar algunas decisiones en base a cálculos de gasto de combustible y de tiempo.
- Mayor eficiencia: los coches autónomos son capaces de estudiar las mejores rutas relación tiempo/consumo, tomando aquella que sea más eficiente. Esto agiliza considerablemente la entrega de la mercancía.
Reducción de la huella de carbono en la logística de comercio electrónico
Como ya hemos mencionado, el comercio electrónico es un sector en auge, por lo que, de no optimizar sus procesos de logística, puede ser responsable de una gran cantidad de emisiones perjudiciales para el entorno. Algunas maneras de disminuir la contaminación derivada de los transportes son:
- Uso de vehículos eléctricos y energías renovables: la transición hacia vehículos eléctricos para el transporte de mercancías puede reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, el uso de energías renovables para cargar estos coches contribuirá aún más a la disminución de la huella de carbono.
- Optimización de rutas y entrega inteligente: utilizar tecnologías avanzadas para optimizar las rutas de entrega, como los ya mencionados vehículos autónomos, puede reducir las distancias recorridas y el consumo de combustible.
- Consolidación de envíos y empaquetado sostenible: agrupar varios pedidos en una sola entrega puede reducir los viajes y, por lo tanto, las emisiones. Asimismo, utilizar materiales de empaquetado sostenibles y reciclables ayudará a generar residuos.
- Logística compartida: las empresas de comercio electrónico pueden colaborar para compartir recursos logísticos y reducir el número de viajes redundantes, lo que puede llevar a una mayor eficiencia y una menor huella de carbono.
Oportunidades y retos en la adopción de la movilidad eléctrica
Si bien la adopción de una flota eléctrica por parte de las empresas logísticas es una gran oportunidad para aumentar su eficiencia y disminuir sus gastos y contaminación, esto no deja de estar exentos de algunos desafíos que cabe superar.
- Más puntos de carga públicos: si bien es cierto que van en aumento cada año, el número disponible en comparación con gasolineras, sigue siendo mucho más bajo.
- Infraestructura adecuada: ya que exige que se coloquen cargadores en las instalaciones de la compañía, lo que conlleva un desembolso económico. A fin de cuentas, las empresas necesitan asegurarse de que sus empleados y flotas tengan acceso a puntos de carga convenientes y confiables.
- Autonomía y rango limitado: aunque la autonomía de los vehículos eléctricos ha mejorado significativamente en los últimos años, todavía puede ser un desafío para algunas empresas que necesitan cubrir largas distancias o realizar viajes continuos sin tiempo para recargar.
Unido a estos, también existen algunas oportunidades en dicho ámbito que cabe valorar:
- Mejora de la imagen de marca: las empresas que adoptan la movilidad eléctrica pueden mejorar su imagen de marca y reputación al demostrar su compromiso con la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.
- Mayor competencia en el mercado: gracias a que cada vez más usuarios apuestas por empresas que cuidan el medioambiente y se preocupan por disminuir su impacto en el entorno.
- Acceso a mercados emergentes: algunos países y regiones están incentivando activamente la adopción de vehículos eléctricos y ofreciendo beneficios adicionales para las empresas que los utilizan. Al adoptar la movilidad eléctrica, las compañías pueden acceder a mercados emergentes con políticas y regulaciones favorables para vehículos eléctricos.
La instalación de puntos de recarga en empresas de logística
Como ya puntualizamos, al apostar por una flota eléctrica en tu empresa, es necesario disponer puntos de recarga en las instalaciones de la compañía. Aunque pueda parecer lo contrario, lo cierto es que esta instalación suele ser sencilla y sin grandes complicaciones asociadas.
En TotalEnergies ponemos a tu alcance un servicio experto de instalación de puntos de recarga para empresas totalmente adaptado a las necesidades de cada una ellas. ¡Porque no todos los negocios son iguales! Además, gracias a nuestra práctica calculadora online, te será más fácil que nunca consultar un presupuesto aproximado.
Impulso gubernamental y ayudas para la implementación de flotas eléctricas
Buscando aumentar el uso de movilidad sostenible entre compañías y empresas, cada vez son más las ayudas públicas que existen para implementar flotas eléctricas. Destaca, especialmente, el programa MOVES FLOTAS, cuya tercera, y por el momento última convocatoria, fue publicada en el Extracto de la Resolución de 14 de julio de 2023, del Consejo de Administración de E.P.E. Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), M.P.
Estas subvenciones son financiadas por la Unión Europea, y concedidas por el IDEA y el Ministerio para La Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Como se explica desde la propia página del citado ministerio, los planes pueden abarcar desde el cambio de autos de gasolina por autos eléctricos, hasta la construcción de lugares para cargar estos vehículos en la compañía, así como comprar o ajustar sistemas que ayuden a manejar estos coches.