Seguro que, en más de una ocasión, y más con las altas temperaturas veraniegas, te has preguntado cuál debe ser la temperatura correcta para programar tu nevera. Y es que mantener los grados de este electrodoméstico es clave si queremos conservar nuestros alimentos en perfecto estado y mantener a raya su consumo energético, para evitar sorpresas desagradables en la factura de la luz. Por eso, toma nota de los grados a los que debes mantener tu nevera en verano y no tendrás que hacer frente a ninguno de estas situaciones.
¿Cuál es el consumo de luz de una nevera en verano?
La nevera es uno de los electrodomésticos que más dudas generan respecto a su consumo eléctrico. No podemos olvidar que permanece encendida las 24 horas del día, por lo que es más que comprensible que nos preocupe cuál es su eficiencia y cómo afecta su uso a nuestra factura eléctrica.
De media, el consumo de una nevera se sitúa alrededor de los 100 y los 800 kWh al año, lo que supone el 14% del consumo total de energía de un hogar. Aun así, este gasto energético puede variar en función de distintos factores claves, como:
¿Qué temperatura ideal debe tener la nevera en verano?
Lo primero que debes tener en cuenta es que es fundamental bajar la temperatura de la nevera durante los meses de verano, y más, si se trata de un electrodoméstico antiguo, ya que aquellos que son más modernos o con mayor eficiencia energética cuentan con sistemas que permiten regular la temperatura y ajustarla, según tus necesidades.
Por regla general, durante el verano, la temperatura ideal de una nevera es de 4°C, aunque en zonas geográficas donde esta estación del año es excesivamente cálida, podría ser conveniente bajarla a 2°C. Mientras que el congelador, lo ideal es mantenerlo en torno a los -18°C para favorecer el ahorro de energía.
Consejos para ahorrar luz en tu nevera en verano
- Sitúa la nevera en un lugar adecuado: debes colocarla lejos de las fuentes de calor como el horno o la vitrocerámica. Además, lo ideal es que elijas una zona fría, seca y bien ventilada para favorecer el mantenimiento de la temperatura del interior.
- Mantén la puerta cerrada: evita abrir y cerrar continuamente la nevera ni mantengas la puerta durante mucho tiempo abierta, ya que cuando lo haces, la temperatura interior sube y la nevera necesita emplear más energía para recuperar los grados perdidos.
- Revisa las juntas de las puertas: si las ves dañados o desgastados, debes limpiarlas adecuadamente o reemplazarlos, porque pueden provocar fugas de aire que supondrán un mayor gasto energético.
- Evita introducir alimentos calientes: lo ideal es esperar a que se enfríe la comida antes de meterla en la nevera porque si no tendrá que gastar más energía para refrigerar el plato cocinado.
- No la llenes demasiado: así permitirás que el aire frío circule libremente. Si necesitas hacerlo, te recomendamos que bajes la temperatura de la nevera un grado.
- Organiza los alimentos correctamente: para que los alimentos duren más tiempo, mientras ahorras energía, debes colocarlos de manera adecuada, ya que el frío no se distribuye de igual forma en el interior de la nevera, ni todos los alimentos requieren la misma temperatura. Para ello, te recomendamos una serie de trucos que te ayudarán:
- Coloca cerca del refrigerador los alimentos que necesitan una temperatura más baja para su conservación, como son los pescados y las carnes.
- Las frutas y las verduras deben ir en los cajones destinados para ello, que suelen estar en la parte baja de la nevera.
- En el fondo deben colocarse los productos más frescos y en la zona delantera aquellos que están próximos a caducar.
- Los embutidos, los huevos y los yogures deben ir en la parte media y alta de la nevera.
- En la puerta, que es la zona menos fría, lo ideal es poner los productos envasados como son: las salsas, las mantequillas, las mermeladas, los refrescos, etc.
Como ves, el ahorro es posible y más si tienes contratada la mejor tarifa eléctrica del mercado, como la que te ofrecemos en TotalEnergies. ¿Cuál se adapta mejor a las necesidades de tu hogar?